Una degustación palermitana para el Club Cuisine&Vins

En julio decidimos invitar a los socios del Club Cuisine&Vins a La Malbequería, donde probamos vinos orgánicos, sustentables y biodinámicos explorando algunas de las bodegas más interesantes del país.



Aunque los más conservadores se espanten con algunas de sus interpretaciones, lo cierto es que el famoso dicho "en la variedad está el gusto" es aplicable a cualquier cantidad de cosas. Bien lo sabemos nosotros (35 años hablando de la misma comida y los mismos vinos hubiesen sido aburridísimos) y mejor aun lo saben los socios del Club Cuisine&Vins, para quienes el elemento sorpresa y la intriga de qué les llegará en la caja de vinos del mes es uno de los puntos más emocionantes de pertenecer a nuestra familia de vinófilos y sibaritas.

También es cierto, y a esto íbamos, en el caso de las degustaciones. En junio agasajamos a los socios con una experiencia por demás francesa al hacer nuestra degustación en el salón Regence del Alvear, con vinos literalmente franceses y otros elaborados con maestría frencha en Mendoza. Todas las fotos que vimos en redes, y las que subimos nosotros, muestran los techos altísimos, los detalles lujosos y, usando la palabra con cierta gracia, glamour. Fue el escenario perfecto, además, para presentar nuestra nueva y muy aplaudida cristalería, hecha por R Cristal en tierras mendocinas.

Encaramos la segunda mitad del año con otro tono, más tranquilos, diciendo que 2019 se está pasando rapidísimo pero no por eso hay que dejar de regalarse momentos de disfrute y desconexión. Para eso nos fuimos de los salones y los hoteles, de los caireles y las lentejuelas, nos alejamos de Recoleta y Retiro, nos apartamos por un rato de los vinos tradicionales y del viejo mundo, para proponer un encuentro más íntimo en Palermo. La Malbequería es un lugar que cada vez cosecha más habitués, por sus patios, su jardín, sus espacios para comer, su impecable carta y su vinoteca, en la que se consigue de todo.

Desde hace un tiempo los socios del Club acceden a un 20% de ahorro en almuerzos y cena todos los días de la semana, y los comentarios sobre lo bien que se lo pasa hicieron que eligiéramos el lugar para una degustación especial. Después de picotear algunas cositas, nuestra sommelier Ana Paula Arias presentó a Verónica Reising, una de las sommeliers de La Malbequería a quien entrevistamos hace poco, para explicar de qué iba la cata de este mes. E iba de esto: vinos orgánicos, enología sustentable y viticultura biodinámica. Fascinante, por supuesto. Hablamos de Daniel Pi con su enfoque esotérico (esa fue la palabra, de verdad), de muchas bodegas que producen vinos orgánicos pero no están certificados como tales, y de otras cosas, algunas de las cuales hemos hablado en notas y entrevistas.

Ustedes quieren saber sobre los vinos, seguramente, así que van. Con las copas de R Cristal en mano, arrancamos como siempre con un espumante, que en este caso fue el Alma 4 Pinot Chardonnay, de Familia Zuccardi: un Extra Brut 70% Pinot Noir 30% Chardonnay exquisito. La Malbequería es la primera vinoteca especializada en Malbec, por lo que correspondía seguir la línea de la cepa nacional, y así lo hicimos. El primer vino fue el Colomé Auténtico Malbec, uno de nuestros vinos preferidos y homenaje a los pioneros de la viticultura salteña, elaborado con viñedos de 90 años de edad. Luego pasamos al Lala Lá Malbec 2017, un vino orgánico lindo, versátil y definido por quienes lo hacen como "indie". Es mendocino, joven e informal, y le encantó a todos. El último vino no llegó en botella, sino en decantador; al Tikal Natural 2015 Malbec-Syrah le vino bien el aire para lucir toda su magia. Esta etiqueta, certificada biodinámica, está compuesta por un 60% de Malbec y un 40% de Syrah, y es fresco y animado en boca, con notas de frambuesa y especias.

En La Malbequería se come bárbaro, y quedó demostrado por algunas de las cosas que fueron llegando a la mesa durante la degustación, como empanadas salteñas, quesos varios y unos pequeños choripanes de los que fue difícil comer solo uno. Muchos de los socios que asistieron a la degustación, de hecho, optaron por quedarse a comer en el restaurante de la vinoteca para explorar la carta más a fondo.

Mejor que leerlo es vivirlo. Asóciense hoy al Club Cuisine&Vins y acompáñennos en futuras degustaciones como la que tuvimos este mes. Siendo parte del Club van a recibir seis vinazos todos los meses, además de una tarjeta de beneficios exclusivos y acceso a montones de privilegios y experiencias únicas. Basta con escribirnos por mail a cuisine@cuisine.com.ar o por whatsapp al 11-2869-6069. ¡Nos vemos en la próxima!



Comentarios