Argentina ya tiene su Champagne Day
2017-10-11En una exclusiva velada realizada
por Moët Hennessy en la Embajada de Francia en Buenos Aires, un grupo selecto de
periodistas y personalidades del mundo vitivinícola/gourmet recibieron cátedra
acerca de las mejores burbujas del mundo.
"¿A qué le podemos decir
champagne?”, arrancó simpatiquísimo el embajador francés Pierre Henri Guinard en
su palacio, mientras le daba la bienvenida al evento, a los comensales y a los
otros anfitriones de la noche, representantes de Moët Hennessy Argentina, como
Ramiro Otaño, encargado de recibir a los sesenta invitados. Y así, entre historias
de la maison y esos personajes fascinantes que dieron el nombre a toda esta
sofisticación (como abad Dom Pierre Pérignon, Madame Clicquot, Joseph Krug, Dom
Thierry Ruinart y Claude Moët) transcurrió la noche, que fue guiada en cada
paso por Hervé Birnie Scott, director de bodegas, viñedos y enología. En el día
del champagne hubo música, deliciosa gastronomía e historias únicas sobre las
grandes etiquetas que son ícono y leyenda.
Si bien en Argentina a todo vino
espumoso, sin importar sus variedades o procedencia se le suele decir
champagne, se sabe que esto no es correcto, ya que el Champagne es una
apelación de origen, una de las más reconocidas del mundo, y es por esto que
debe cumplir un estricto abanico de requisitos. Por ejemplo, que
las uvas se cosechen y elaboren completamente en el área delimitada por esta
apelación que queda en el norte de Francia. Además, deben utilizarse únicamente
las cepas Chardonnay, Pinot Noir y Pinot Meunier. Scott habló sobre esto y
varias anécdotas que, en combinación con el embajador, se llevaron los
aplausos. Finalmente presentó a las estrellas: Dom
Pérignon, Veuve Clicquot, Moët & Chandon, Ruinart y Krug.
Se sabe
que el primero fue un tributo a la visión de un monje benedictino ciego, que
según cuenta la leyenda, exclamó "estoy bebiendo las estrellas", al probar
las botellas con burbujas. Siempre es un vintage, un vino que se elaboró con
uvas de una sola añada. Este año, se podrá conseguir por primera vez en
Argentina un Dom Pérignon magnum, del Vintage 2009.
La viuda,
esa belleza con etiqueta color maíz, cumple 140 años. Tal vez el más
emblemático de la Maison, Veuve Clicquot Yellow Label es el champagne más
vendido en Argentina. La Maison se llama así homenajeando a Barbe-Nicole
Ponsardin, la Madame Clicquot, quien se puso al hombro la maison familiar por
la muerte prematura de su marido de 27 años.
Ruinart
es el diamante del champagne, ya que es la primera Maison establecida. Su
historia viene desde 1729 cuando Nicolás Ruinart, sobrino de Dom Thierry
Ruinart, fundó la Maison Ruinart, y dejo marcado para siempre el nombre de su
tío. El Ruinart Rosé sorprendió por su intensidad y aroma.
El
momento de degustar el Krug Grande Cuvée fue un
verdadero ritual. La historia también es fantástica. Joseph Krug, fundador de la
Maison Krug, quería ofrecerle a sus clientes un champagne único, lograr lo
mejor todos los años sin importar de los cambios del clima, y lo viene logrando
desde el año 1843. Hoy, en Argentina podemos disfrutar del Krug Grande Cuvée
163ème ÉDITION. Esta creación es embotellada y, luego de permanecer seis años
en contacto con sus levaduras y un año más después de su degüelle, está
disponible en el mercado.
Lujo,
historia y cátedra de infinito buen gusto. Así, con todo, se inauguró el
Champagne Day en Buenos Aires, una ciudad famosa por su amor a las burbujas.
Los precios
Dom Pérignon Blanc Vintage 2009 1500ml $11.000
Dom
Pérignon Plénitude 2 Vintage 1998 $10.600
Krug Grande
Cuvée 163ème édition $5.500
Ruinart
Rosé $2.700
Veuve
Clicquot La Grande Dame Blanc 2006 $4.650
Veuve
Clicquot Extra Brut Extra Old $2.465